Cuando pica el corazón…
A todos nos ha picado un insecto alguna vez… A veces, lo vemos en el momento en que nos pica; en otras oportunidades no, pero podemos percatarnos de su presencia por la sensación de picazón o por la marca que deja en nuestra piel (la famosa picadura)… Esas dos características, la picazón y la picadura, cumplen una función: nos advierten que algo ha afectado nuestra dermis. Ese mismo proceso tiene lugar cuando vivimos una situación que nos afecta emocionalmente… Puede que en el momento no percibamos los efectos que la misma produce en nosotros, pero, algunas horas o días después, comenzamos a sentir cierta incomodidad… como la que produce la picadura (nos arde, nos deja la piel irritada, genera sensación de picazón…). Las “picaduras emocionales” nos permiten revisar las situaciones que vivimos a diario, algunas de las cuales pueden afectarnos especialmente, dejándonos en un estado de incomodidad y malestar… Tal vez convenga pensar qué puede habernos “picado”, qué situación v...